VALLADOLID, OTRO PUERTO EN LA PRIMERA CIRCUNNAVEGACIÓN

08.12.2019 12:14

El 20 de septiembre de 1519 comenzaba en Sevilla una empresa naval que después de tres años de múltiples penalidades completaba la primera vuelta al mundo. Una hazaña de proporciones inmensas, culminada gracias a una mezcla de arrojo, valor, destreza marinera y visión de Juan Sebastián Elcano, que regresó a Sevilla el 6 de septiembre de 1522.

En este proyecto que trataba de llegar a Oriente navegando siempre hacia el Oeste, Valladolid, la vieja ciudad castellana, seria, austera, alejada del bullicio de los puertos y de los negocios de la Casa de Contratación de las Indias de Sevilla, desplegó un protagonismo que ha pasado despercibido en la historia.

Cuando Fernando de Magallanes desoido por el rey portugués Manuel I se dirigió al monarca español para ofrecerle su proyecto, vino hasta la ciudad de Valladolid, donde el rey Carlos I habia llegado en febrero de 1518 para proclamarse rey de Castilla, ante las Cortes reunidas en el Colegio de San Gregorio, junto al monasterio de San Pablo.

En este punto Carlos I de España que será el emperador Carlos V tiene 19 años y acaba de recibir la herencia endeudada de su abuelo Maximiliano. Por este motivo a Carlos le interesa la propuesta de Magallanes que contemplaba como objetivo de su empresa, encontrar un paso para ir desde las aguas del Atlántico hasta lo que entonces se denominaba mar del Sur, después océano Pacífico. Por este paso se abriría una ruta alternativa a la utilizada por los portugueses para llegar a las islas de las Especias.

El 22 de marzo del 1518 Valladolid es testigo privilegiado de la firma de las Capitulaciones, entre el rey Carlos I y el navegante portugués Fernando de Magallanes. En ellas le nombra Adelantado de la Corona y pone a su disposición una flota de cinco naves que amparada y costeada por la Corona española realizó la mayor aventura marítima de todos los tiempos.

En ella se mezclaron suspicacias e intereses personales con tormentas, deserciones y motines. Sin embargo las dificultades se aliaron con la indudable determinación y perseverancia de Magallanes que contra viento y marea prosiguió su singladura. Cruzaron el Estrecho que más tarde se llamaría de Magallanes, atravesaron el Océano Pacífico en un penosísimo viaje que acabaría con parte de la expedición debido al hambre y a enfermedades como el escorbuto, y fueron de isla en isla en los lejanos archipiélagos que hoy conocemos como las islas Marianas y las Filipinas, alcanzando, al fin, su objetivo, las Islas de las Especias, las Molucas, el Dorado de Oriente.

La muerte de Magallanes en Mactán,sur de las actuales Filipinas, en un combate contra los nativos, en abril de 1521, hizo que Elcano asumiera un protagonismo en la expedición que no había tenido hasta entonces.


La expedición fue perdiendo barcos y hombres hasta que sólo quedó la Victoria, y ante la amenaza portuguesa, Elcano que ya estaba al mando tomó la decisión de volver pero no lo haría por la ruta que habían traído, sino que pondría proa al Índico, y regresaría por aguas del hemisferio portugués, dando la primera vuelta al mundo, en un viaje vivido como una auténtica odisea. Vientos desfavorables, hambre y miedo a ser atacados por los portugueses convirtieRon este viaje en heroico, llevado a cabo por la decidida voluntad de Elcano de no rendirse ante la dificultad.

Elcano que había incumplido las órdenes del rey, puesto que habia entrado en las aguas adjudicadas a los portugueses, escribió a Carlos I para darle cuentas de las vicisitudes del viaje. Esta carta la recibió el ya emperador Carlos V en Valladolid. Despues de su periplo imperial había regresado a la ciudad castellana el 4 de septiembe de 1522, y de nuevo Valladolid fue testigo privilegiado del epílogo de la aventura marítima que sirvió para inaugurar una nueva ruta hacia Oriente, para disputar el comercio marítimo a los portugueses, para comprobar la existencia de un Estrecho, hoy conocido como el de Magallanes, que conectaba Atlántico y Pacífico, para abrir al conocimiento de Europa nuevas culturas ignotas hasta ese momento. Para, en definitiva, conectar todos los territorios del planeta en el primer gran ejercicio de globalidad de la Humanidadad.


Cuando Carlos I, respondiendo a la carta de Elcano, le indicó que acudiera a Valladolid con sus dos mejores testigos, para darle cuenta pormenorizada del viaje «Porque yo me quiero informar de vos, muy particularmente del viaje que habéis hecho, y de lo en él sucedido, vos mando que luego que esta veáis, toméis dos personas de las que han venido con vos, las más cuerdas y de mejor razón, y os vengáis con ellas donde yo estuviere...», Elcano cumple esa orden cerrando así el círculo que situaba a Valladolid, tierra adentro, en el epicentro de una aventura marítima que sumó certezas y posibilidades para el nuevo imperio español de Carlos V.

En Valladolid se firmaron las Capitulaciones con Magallanes que posibilitaron la expedición y en Valladolid se le concedió a Elcano el lema de su escudo " Primes circumdedisti me"reconociendo su hazaña. La historia tiene una deuda con esta ciudad castellana en la que se sentaron y nacieron las claves de la primera globalización de la Historia.

Mercedes Pordomingo Esteban

Teniente RV

© 2011 Todos los derechos reservados.

Creado con Webnode